¡¡Guerra!!

Al fin terminó la espectiva. Las naves robot estáticas sobre diversas ciudades y fuertes de Eudoria fueron una amenaza difícil de obviar durante estos últimos días. Pero como sucede con estas cosas, todos pedíamos que finalizara de una buena vez la espera y comenzara el ataque de los robots.

Ante la promesa de MindArk de multiplicar por tres los skills a recibir durante los días que dure el combate me apresté a hacer mi modesta contribución a la defensa de Calypso. Vendí todo lo que podía vender, reparé algo mi FAP y las armas y guarde unos ped para comprar ammo.

Varios Argentropicos (Barbys, John, Kike, Julio y Chipi) pasamos las últimas horas de paz en Fort Ithaca velando las armas a la espera del inicio de las acciones. Cuando todo comenzó los puntos rojos inmediatamente se hicieron dueños de la pantalla del radar. Cientos de robots de todos los tipos y de los niveles más altos hacian casi imposible pasar más que unos minutos sin "fapearse" para aumentar la salud del avatar. Apesar de los FAP y los VIVO las visitas a los revival son frecuentes y reiteradas. Por momentos es un caos, los bots corren de aquí para allá y más de una vez el que estabas comenzando a matar en este lugar termina muerto en manos de otro avatar un par de decenas de metros más allá.

A pesar de un global que hemos logrado en team al principio de la sesión las pérdidas son grandes y quedo mal parado para darle continuidad a mi presencia en la guerra.

Horas más tarde cuando vuelvo a conectarme me teleporto a Nea´s con el propósito de swetear un poco para recomponer las finanzas, pero a minutos de haber llegado por el chat de la sociedad recibo el mensaje de Julio que me dice: "José, vente ya a Fort Troy...".

No puedo negarme, junto todo lo que me queda de peds y compro 1,8k de ammo, quedando sin reparar el FAP y las armas. Es que es eso o reparar y no disponer de peds para la munición.

Rápidamente me sumo el team que me proponen y pocos segundos más tarde estoy listo para combatir. Esta vez con mejores perspectivas ya que todos los bots son de niveles de maturity más bajo que los de Zychion, Hadesheim o Ithaca. Sin alardear puedo decir que en combates mano a mano ninguno de los bots que andan dando vuelta por aqui puede vencerme, si embargo son tantos, sus ataque vienen desde todos los ángulos y se suceden a un ritmo tan frenético que no es fácil sobrevivir. Las sucesivas visitas al revival sirven de testimonio y el decay de mi FAP también.

Si bien los bots se concentran fuera del perímetro de la muralla de Troy, están cerca del Auction donde se encuentra el "Revival Terminal" y a lo sumo habrá que recorrer 100 metros para estar en el centro de la acción. Esto ayuda para darle continuidad y ritmo a la situación al mismo tiempo que "revivir" dentro del auction y lejos de los combates hace mucho más rápido y fácil el proceso de reintegrarse al team.

Pero el factor suerte, lo aleatorio, siempre tiene su cuota de protagonismo en Entropia Universe. Luego de morir a manos de vaya a saber que tipo de robot revivo una vez más en el auction. Me toma unos segundos "fapearme" e inicio la carrera hacia donde habia dejado a mis amigos combatiendo, cruzo la muralla y de inmediato los veo a los tiros contra un indeterminado punto rojo. Me dirijo hacia ellos. Cuando estoy a un par de decenas de metros de ellos me deslumbran luces amarillas volando a nuestro alrededor y , como en la semana anterior (ver Ambus y Argos), quedo en la puerta de un global importante, tanto que me dicen por el chat que puede llegar a los 200 peds.

Demoro sólo un par de segundos en llegar a la posición en la que se encuentran y antes de que podamos entablar un diálogo los bots nos recuerdan que esto se trata de una guerra y que la única forma de diálogo que conocen es a los tiros.

La cacería sigue su curso y finalmente me quedo sin ammo y sin FAP, son casi las 4 a.m. y el sueño comienza a nublar mi vista. Me despido y me dirijo hacia el auction a lamer mis heridas y contar los agujeros en mi armadura. ¿El global? Aparentemente ha sido para el saqueador y yo me he quedado sin nada. Esto no es un reclamo puesto que al no haber acordado nada con anterioridad al inicio de la cacería la distribución de los botines, total o parcial, queda a criterio del que lo recibió. No puedo ni debo hacer un juicio ético en este sentido o un juicio de valor sobre quién actuó de acuerdo a lo que su conciencia manda.

Pero una vez más la enseñanza es la siguiente: no den nada por sentado, arreglen las condiciones de la cacería antes de comenzarla. Más de una vez he visto conflictos por este tema, en el que más vale prevenir que curar.