Heráclito y el cambio

El de la imagen es Heraclito, un filósofo griego nacido en la desaparecida Éfeso (actual Turquía) en el año 535 a.C. A este señor se la atribuye entre otras cosas el aforismo "nadie se baña en el mismo río dos veces" ya que sostenía que lo único permanente es el cambio en si mismo.

Claro que el bueno de Heráclito nunca tuvo la oportunidad de jugar en nuestro universo virtual, porque de haberlo hecho habría afirmado categoricamente lo que sostenía filosoficamente: vivimos inmersos en el cambio.

Sin duda alguna en estos últimos 2.500 años muchas cosas han cambiado y, si la humanidad sobrevive a sus desatinos, muchísimas cosas más cambiarán en los próximos 2.500. Sin embargo algo que hemos aprendido con el correr de los años es que el éxito de una economía se basa, entre otras cosas, en la previsibilidad. Esta, a su vez, se basa en reglas de juego estables. Todos los involucrados en un escenario económico se benefician de la estabilidad de las reglas de juego. Como consecuencia directa los capitales tienden a invertir para lograr beneficos y los trabajadores se benefician de esas inversiones con trabajo.

Esto a grandes rasgos y sin pretender dar una clase de economía básica. Uds. ya imaginarán el porque de esta larga introducción. Si bien ya lo he mencionado en algún otro artículo en este blog vale la pena reiterarlo: Marco, no nos cambies las reglas de juego en cada oportunidad que puedas, se sensato, por momentos observa el desarrollo del juego como un jugador promedio y no siempre como John Neverdie Jacobs, intenta hacerlo más simple, llevadero y compresible para los novatos, planifica a largo plazo considerando las dificultades que enfrenta el jugador todos los días, considera a todos nosotros como tus socios y no como tus esclavos, piensa en términos de pequeños beneficios obtenidos de muchos jugadores y no en grandes beneficios obtenidos de unos pocos y, por sobre todas las cosas, toma conciencia de que todos nosotros pudomos cortar el vínculo que nos relaciona sólo con un par de clicks (como ya lo han hecho muchos, demasiados podría decirse).

Heráclito estaría feliz de trabajar asesorando a Marco, pero este último debería tener presente que si bien puede cambiarnos permanentemente las reglas de juego, llegado el momento nosotros también podemos cambiar de juego.